¿Hay animales buscadores de setas?

Hay dos animales capaces de buscar setas: uno, el cerdo, lo hace por propio instinto, y otro, el perro, porque el hombre lo adiestra para ello. No obstante, las setas que buscan pertenecen a una clase especial, relativamente rara. Reciben el nombre de trufas. Su rareza consiste en que crecen debajo de la superficie del terreno, en lugares en que el suelo tiene una composición química especial. Son muy sabrosas y, debido a que no abundan tanto como las demás, alcanzan precios muy elevados.
Se desarrolla en asociación con las raíces de ciertos árboles (encinas, robles y avellanos).
Los tamaños de las trufas oscilan desde el de un guisante al de una naranja, aunque se han dado casos de trufas gigantes, de hasta 700 gramos.